Ads 468x60px

miércoles, 16 de enero de 2013

Diferentes experimentaciones masculinas dentro del coito “Caso Ken”.

CURSO
Sexualidad de la Nueva Era Online
“Sea el primero en aprender los conocimientos sexuales especiales”
Dar click: (aquí) para acceder al curso.


Sexualidad de la Nueva Era - Ken se encontraba tranquilo porque generalmente en sus relaciones sexuales experimentaba la eyaculación alrededor de los cinco minutos de iniciado el coito, mientras que todas las parejas que había tenido hasta ese momento alcanzaban el orgasmo alrededor de los tres minutos de coito.

Con el paso del tiempo Ken formaliza una relación.

En el primer encuentro sexual experimentado con su nueva pareja Ken eyaculó alrededor de los cinco minutos de coito (tal como estaba acostumbrado a hacerlo), pero ella todavía no había alcanzado el orgasmo (su nueva pareja estaba acostumbrada a tenerlo luego de los diez minutos de coito).

En los siguientes encuentros sexuales la situación se volvió a repetir, Ken no sabía cómo resolver el problema… al final la relación no funcionó.

Pasado algún tiempo Ken se interesó en otra mujer, ella experimentaba su orgasmo alrededor de los cinco minutos de coito y él eyaculaba también alrededor de los cinco minutos de coito, por lo que Ken se encontraba un poco intranquilo dado que había ocasiones en las cuales su pareja no experimentaba el orgasmo (porque él eyaculaba un poco antes).  

Los dos se enamoraron, se casaron y como ambos tenían alrededor de veinte años hacían el amor todos los días.
                               
Con el paso de los años Ken se dio cuenta que mientras más edad tenía, luego de una eyaculación necesitaba de más tiempo para recuperar su energía sexual (erección), entonces poco a poco la pareja pasó de tener relaciones sexuales diarias, a experimentarlas pasando un día, dos veces por semana, una vez a la semana, dos veces al mes…

Y cuando Ken superó los cuarenta y cinco años de edad tuvo su primer episodio de impotencia sexual, el mismo que se repitió varias veces años más tarde.

Y cuando sobrepasó los sesenta años de edad debido a problemas de salud dejó de tener relaciones sexuales (porque luego de eyacular se sentía demasiado cansado y débil), aunque su esposa las deseaba fervientemente, un episodio muy triste.

Pero qué hubiera pasado si Ken a la edad de veinte y cinco años aprendía a desencadenar micro eyaculaciones: Con ésta experimentación se pierde menos cantidad de energía sexual (erección) y hubiera podido retomar el ritmo de encuentros sexuales diarios, solucionando inclusive cualquier problema relacionado con la eyaculación precoz.

Y que hubiera pasado si a la edad de treinta años Ken aprendía a desencadenar orgasmos: Con ésta experimentación hubiera elevado el tiempo de coito aumentado significativamente el placer de la pareja e inclusive hubiese eliminando la posibilidad de sufrir disfunción eréctil (impotencia sexual) por el resto de su vida.

Y que hubiera pasado si Ken alrededor de los cincuenta años aprendía a gozar del sexo energético: Con ésta experimentación Ken hubiera terminado la relación sexual completamente energizado, feliz, con un sistema inmunológico de hierro y con la energía necesaria para continuar una vida sexual activa hasta pasado los 80 años de edad para complacencia y satisfacción de su esposa.

Nota: La presente historia constituye un ejemplo conceptual para fines didácticos.